“Habiendo dirigido mis miradas a otra parte, vi nuevas almas a la orilla de un gran río, por lo cual, dije:
– Maestro, dígnate manifestarme quiénes son y por qué ley parecen ésos tan prontos a atravesar el río, según puedo ver a favor de esta débil claridad.
Y él me respondió:
– Te lo diré cuando pongamos nuestros pies sobre la triste orilla del Aqueronte.”
La divina comedia. Canto tercero. Dante Alighieri
Obra realizada en papel Figueres 280gr.
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